Qué película tan maravillosa. No sé cuántas veces la he visto. Además es de esas cintas que no tiene detractores, a todos nos encantó, todos nos quedamos con alguna frase y -casi- todos nos emocionamos.
Hace unos dos años me enteré de que existía una cadena de restaurantes llamada Bubba Gump Shrimp Co. Hay bastantes en Estados Unidos. Aquí en Japón hay tres, uno en Tokio , otro en Toyosu y un tercero Osaka. Por curiosidad, por ver cómo era, tenía que ir ¿no?
Como os podéis imaginar, su especialidad son las gambas pero en el menú ofrecen de todo. Aros de cebolla, quesadillas, hamburguesas, mejillones, almejas…
La comida está bastante bien. Las gambas, con una salsa un poco picante, no fueron de mi agrado; en España estamos acostumbrados a comerlas de otra manera. Por lo demás, genial pero la verdadera gracia es estar rodeado de cosas de Forrest, con frases de la película por todas partes, la carta de bebidas en una pala de ping-pong y también, numerosos monitores con la película subtitulada en japonés.
El local en Tokio es bastante grande (está ubicado en el Tokyo Dome City -os hablé aquí de esta zona) y cuenta con una tienda donde puedes comprar cualquier cosa con la marca Forrest Gump. Lo que no me esperaba, era encontrar un pequeño museo.
En una vitrina, en el centro de la tienda, tienen el vestuario original que Tom Hanks llevaba en la primera escena de la película, sentando en el banco con su caja de bombones sobre las piernas. “Mamá siempre decía: la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar.” Gran verdad…