Vuelvo a Japón ¡con perro incluido!

¿Qué tal estáis? ¿Cómo van las primeras semanas del año? Yo os escribo desde Soria, mi ciudad natal, a donde llegué el pasado 19 de diciembre y donde me quedan pocas horas: ¡hoy vuelvo a Japón! Y como siempre, mis últimas 24 horas las he dedicado a enumerar y disfrutar de las últimas veces que, hasta la próxima visita, hago algo. Por ejemplo, la última vez que mi padre me corta jamón, la última vez que duermo en mi cama, la última vez que entro a ver a mi madre a su trabajo, la última vez que conduzco mi coche o la última vez que paseo con mi perrita… Aunque sobre este último punto he de matizar que es “la última vez que paseo con mi perrita EN SORIA” – lógicamente hasta que volvamos – porque si todo va bien, y no tenemos ningún imprevisto de última hora con la aerolínea o en los aeropuertos, nuestra perrita ¡viaja con nosotros a Japón!

Carlota en su transportin (perro en transportin de tela)

Aquí la tenéis, os presento a Carlota, un West Highland White Terrierde siete años. Mientras os escribo estoy aprovechando para hacer algunas pruebas en el transportin: es la primera vez que va a viajar en avión y son muchas horas ahí metida. Volamos con KLM. Hasta Amsterdam, donde hacemos escala, son 2 h 35 min; desde allí a Tokio 11 h 20 min. Lo bueno es que al pesar menos de 8 kg puede volar con nosotros en cabina, debajo del asiento delantero, por lo que creo que tendrá un buen viaje y estará tranquila. ¿Precio? 200 euros.

Pasaportes

Como podéis suponer son numerosos los trámites que hay que hacer para poder llevar a tu mascota a otro pais. Dependiendo del destino los requisitos son distintos. Japón es uno de los más exigentes, empezamos a preparar el viaje de Carlota hace más de 6 meses con un análisis de sangre. A partir de ahí certificados y más certificados con los que no os voy a aburrir pero si alguno de vosotros quiere más información, sólo tiene que decírmelo; a mi me vino muy bien la experiencia de una chica española que ya había pasado por todo esto. También, fundamental, ha sido la ayuda de la veterinaria de Carlota. Desde aquí me vais a permitir agradecer a Tamara Redondo y a todo el equipo de Mi Mascota en Soria tanta dedicación y paciencia. Gracias, muchas gracias, sois geniales.

Pañales, absorvente para el suelo, chuches de perro y botella-bebedero

Aunque son pocas cosas, también he preparado un pequeño equipaje de mano para Carlota: unos pañales para perros – por si acaso -, unos absorbentes para colocarle en la base del transportin, unas gominolas de perro y una botella-bebedero (despliegas la botella y el agua cae sobre el molde que la rodea) para darle de beber en cualquier momento.

Como os decía al principio todo está listo (¡y yo muy emocionada!) pero siempre puede haber algún imprevisto de última hora y que Carlota no pueda volar a Japón. Crucemos los dedos y el próximo miércoles os cuento cómo ha ido todo.

¡Hasta pronto España!

¿Te gustaría comentar algo?